domingo, 23 de agosto de 2009

EL FORMALISMO RUSO


En foto: Roman Jakobson (Moscú, 1896-Boston, 1982)


En foto: Víktor Shklovski (1893-1984)



LOS ORÍGENES DE LA POÉTICA CONTEMPORÁNEA: EL FORMALISMO RUSO

Hasta los albores del siglo XX se puede decir que los estudios artísticos -y literarios en particular -, constituían mucho más una actividad "artística" que una disciplina orgánica y científica. En Francia predominaba el comentario de textos cuyo valor dependía funda-mentalmente del gusto y de la agudeza del crítico. En Alemania la literatura era estudiada casi exclusivamente desde un punto de vista histórico, mientras que en otros países, en España e Italia, los estudios literarios eran concebidos como recuentos cronológicos de la vida y de la obra de los autores.Descontentos con estos procedimientos, que también Imperaban en los círculos de críticos y de académicos de la Rusia zarista, hacia 191 5 se constituyeron, en Moscú y en San Petersburgo, sendos grupos de jóvenes intelectuales cuyos propósitos eran renovar totalmente la naturaleza de los estudios literatos y dotarlos de la objetividad y de la base científica de que hasta entonces carecían. Tanto el "Círculo Lingüístico de Moscú" como la "Sociedad para el estudio del lenguaje poético" de San Petersburgo (OPAIAZ), se abrieron paso rápidamente y su doctrina, conocida como Formalismo Ruso, adquirió un cuerpo y un vigor intelectual poco común, gracias a la gran cantidad de inteligentes escritos que se fueron sucediendo con gran éxito.Lo que nos interesa destacar aquí - y someter a examen crítico- es la original concepción del arte (y más específicamente de la literatura) que el Formalismo Ruso elaboró, y que fuera de toda duda, ha sido de singular significación en la constitución de las más vigentes y actuales teorías de la literatura, tanto a uno como a otro lado del Atlántico.El primer principio, mutuamente compartido, era la convicción de que la literatura debe ser, lo mismo que cualquier otro, un objeto con sus propiedades, estructuras y leyes propias. Hasta entonces el arte había sido estudiado exclusivamente como fenómeno ligado y dependiente de la historia. La creencia en la objetividad de la literatura llevó a estos teóricos a indagar con métodos rigurosos y racionales aquello que justamente posibilita que una obra literaria sea considerada como artística. De esta suerte la teoría del método formal elevó la literatura a la categoría de objeto autónomo de la investigación, liberando a la obra literaria de todas las condiciones ajenas a su naturaleza y que impedían un acercamiento objetivo y científico. También aceptaron desde un principio la tesis de Knechenik de que una forma nueva produce un nuevo contenido y de que el contenido queda condicionado por la forma (entendida como la suma de todos los medios artísticos empleados en ella) abandonando de esta suerte la vieja concepción filosófica, hasta entonces plenamente vigente, en la cual es posible distinguir en la obra de arte el contenido de la forma, como el vaso de vino. En 1921 Jakobson propuso como objeto específico de la ciencia literaria lo que denominó "literariedad" ("litoraturnost''), como lo estrictamente artístico de la obra literaria, diferente por cierto del clásico concepto de literatura y, por supuesto, de la obra artística como objeto material. Desde entonces los investigadores formalistas dedicaron sus mejores esfuerzos a describir científicamente el quíd de la literatura, la esencia del fenómeno literario. Obviamente - como ocurrió más tarde con el Círculo de Viena y con el Círculo lingüístico de Praga- no hubo acuerdo en todo, pero sí en suficientes puntos y materias como para que se justifique hablar de una escuela con. un ideario y con una doctrina propia y original.En la empresa se valieron del importante concepto de "función", el que les permitió conectar sus reflexiones abstractas con los textos literarios singulares. Encontramos por ello, en la producción de los formalistas, trabajos puramente teóricos y otros de aplicación en los que se toma y se analiza una obra concreta buscando observar cómo se organizan los hechos literarios, cómo funcionan en el texto los principios y mecanismos de construcción, ya que se veía cada más claro que la obra de arte obedece a principios arquitectónicos de construcción y organización que la dotan de una estructura (en el sentido técnico del término), funcional específica. Pensaron que la poesía era una creación lingüística excepcional posibilitada por ciertas formas estructurales. Ese carácter netamente creador y finalista del lenguaje poético quedó igualmente bajo la atenta mirada de los formalistas rusos.Fue también tarea de los primeros momentos del Formalismo el dedicar cierta energía a destruir algunas arraigadas e influyentes opiniones de conocidos teóricos de la literatura de la Rusia. de la, segunda mitad del XIX. Shklovsky puso de manifiesto en su célebre trabajo de 1916 "El arte como artificio", la insolvencia de la idea de Potebnia y Belinsky que concebían la poesía como "pensamiento por medio de "imágenes". Estos teóricos creían que la poesía era una manera singular de pensar con la ventaja, frente al pensamiento puramente conceptual, que permitiría una determinada economía de fuerzas mentales, una "sensación de ligereza relativa", característica de la vivencia estética, pues la imagen, dice Potebnia, es mucho más clara que lo que el pensamiento conceptual explica. Esta teoría de Potobnia estaba relacionada con otra intuición fecunda que los Formalistas tomarían, corregirían y desarrollarían en el curso de sus investigaciones. Efectivamente, Potebnia había ya postulado que la literatura es esencialmente un lenguaje poético, pero no distinguió entre una función poética y otra simplemente comunicativa del lenguaje., como sí lo hicieron los Formalistas. De cualquier manera creyó ver toda la substancia del arte verbal en la imagen y en la metáfora, lo que limitaba la literatura tan sólo a uno de los artificios o mecanismos de que se vale el artista para producir la obra de arte literaria.Los Formalistas rompieron igualmente con la vieja idea retórica de acuerdo con la cual el lenguaje literario, y específicamente el poético, consistiría poco más o menos en el adorno del lenguaje ordinario mediante los procedimientos retóricas del metro, la rima, el verso y las figuras para propugnar, en cambio, que la poesía obedece a dos principios complementarios: el sintáctico y el rítmico. Pusieron especialmente atención a la forma - aunque más tarde flexibilizaron esta postura- en tanto portadora de los rasgos relevantes de un sistema poético, viniendo por este camino a hacer converger, en definitiva, los concepto de "literariedad" y , "forma".

Tomado de http://teoriasdelaliteratura.blogspot.com/

Lecturas del curso de Teoría literaria II


Universidad Nacional Mayor de San Marcos
Semestre 2009-II
Curso: Teoría literaria II
Profesora: Milagros Carazas


Controles de lectura:

CL 1: BRAVO, José Antonio. 1999, “Estructuras narrativas”. En: Estructuras y técnicas narrativas. Ediciones Copé, Lima., pp. 11-89.

REIS, Carlos. 1981, “Análisis estructural de un cuento de Ana María Matute”. En: Fundamentos y técnicas del análisis literario. Gredos, Madrid, pp. 253-261.

CL 2: FREUD, Sigmund. 1988, “El poeta y los sueños diurnos”; “El esquema del psicoanálisis”, “Dostoievski y el parricidio” y “Personajes psicopáticos en el teatro”. En: Obras completas. Ediciones Orbis, Buenos Aires.

CL 3: VALLEJO, César. 1992, El arte y la revolución. Editora Perú, Lima.

CL 4: CALLIRGOS, 1996, Sobre héroes y batallas. Los caminos de la identidad masculina. Escuela para el desarrollo, Lima.


Textos para ser comentados en clase

Maiakovski, Vladimir. Poemas.

Baudelaire, Charles. Las flores del mal.

Vallejo, César. El tungsteno.

SHAKESPEARE, William. Hamlet.

Miranda, Efraín. Choza.

Vargas Llosa, Mario. La ciudad y los perros.

Bellatín, Mario. Salón de belleza.


El alumno deberá leer estas obras literarias que serán motivo de análisis a lo largo del semestre 2009-II, en el curso de Teoría literaria II.

** Una copia del mismo se encuentra en la Media luna, en el puesto de la Srta. María.



Textos de lectura complementaria:


WHANÓN BENSUSAN, Sultana. 1991, Introducción a la historia de las teorías literarias. Universidad de Granada, Granada.


HUAMÁN, Miguel Ángel (Comp.). Lecturas de Teoría Literaria (Cuadernos pedagógicos) I. Lima, UNMSM – Universidad Nacional “Pedro Ruiz Gallo”, 2002.


HUAMÁN, Miguel Ángel (Comp.). Lecturas de Teoría literaria II. Lima, UNMSM – Universidad Nacional “Pedro Ruiz Gallo”, 2003.

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